Tras denuncias por parte de los vecinos, este jueves las autoridades sanitarias confirmaron que el suministro hídrico en la localidad no es apta para el consumo humano, esto en al menos 1.200 hogares.
Residentes de Pichindangui, al sur de la región de Coquimbo, se han manifestado en diversas ocasiones en contra de la empresa San Isidro, encargada de la red de distribución de agua en la localidad.
Al menos 1.189 familias se encuentran afectadas por la situación. Los vecinos denunciaron que el agua de sus viviendas era salada y no potable, lo que se ha transformado en un verdadero problema para el diario vivir.
La situación habría comenzado a desarrollarse a principios del año pasado, cuando la compañía dio aviso de que había problemas de abastecimiento, por lo cual sería necesario hacer cortes nocturnos o incluso el uso de camiones aljibes.
«Hace más de un año la gente sigue pagando, por lo tanto es justo que mientras pase este proceso, la gente no pague esto», afirmó el alcalde de Los Vilos, Christian Gross, en una entrevista con Mega.
Según informa Diario La Región, la Seremi de Salud, Paola Salas, señaló que «Nosotros desde enero del año pasado le pedimos a la empresa que entregara agua para el consumo humano y que informen los avances que se han ido haciendo a través de la compañía para que el agua llegue a tener parámetros aptos para el consumo humano, ellos nos han pedido que sea en forma transitoria, y también podamos garantizar que las mediciones físicas y químicas, junto con la calidad del agua, estén óptimas»
Se midieron los parámetros de PH, turbiedad y cantidad de cloro libre residual, los que garantizan el consumo del agua potable: «Lamentablemente tuvimos en dos de los cuatro puntos el cloro bajo la norma, en los cuatro hubo problemas de PH – está sobre la norma – y la turbiedad en dos de ellos», añadió.
Además, la Seremi hizo el llamado a no consumir el agua de la red, y que hasta el momento solo pueden seguir bebiendo el agua de los estanques.